En esta
entrada, hablo de mi experiencia en el Hospital de la Caridad y una experiencia
similar de los Estados Unidos, que es mi trabajo del verano pasado en una
residencia para los mayores, Wiley Chrisitan Retirement Community. Aunque hay muchas
diferencias entre mi trabajo específico (en Wiley, solo trabajé en las
actividades, no en un papel de medicina) en los dos sitios, las residencias me
parecen, por la mayoría, muy parecidos.
El
Hospital de la Caridad es un hospital privado, que en realidad, es una residencia
para los hombres mayores hoy en día. El hospital ayuda a los hombres que no
tienen recursos, y es un establecimiento cristiano. Similarmente, Wiley es una
residencia privada que tiene una iglesia cristiano con que es afiliado. Funciona
por la caridad, también, principalmente las donaciones de los miembros de la
iglesia Wiley.
El "Healthcare Center" de Wiley Christian Retirement Community, donde trabajé. También hay apartamentos para la gente mayor que necesite menos asistencia sanitaria, una guardería para los ninos de la iglesia, y "Adult Day Services" para jovenes-adultos con necesidades especiales. |
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Lo que
me sorprendió más es el estado de los hombres en la residencia. Donde trabajé
este verano pasado, había un gran porcentaje de pacientes que tienen un tipo de
demencia, específicamente la enfermedad Alzheimer—casi cada paciente con que
trabajé tenía un tipo de enfermedad mental de la edad. Por otro lado, en el
Hospital de la Caridad, solo he conocido a un hombre que tiene Alzheimer. Aquí,
me parece que diabetes es la enfermedad que se encuentra más. Por eso, el
sistema de trabajar es diferente en los
dos sitios. Por ejemplo, hay muchos más enfermeros en Wiley Christian
Retirement Community, porque la gente requiera atención más constante y más
ayuda con cosas diarias. También, se puede conocerse a los pacientes un poco
más en el Hospital, y hablar más con ellos, porque no hay una barrera mental
para los pacientes, generalmente. Aunque la mayoría de los pacientes de Wiley
nunca me recordó--es como nos re-conocemos por primera vez cada día de trabajo—he
conocido a muchos de los hombres y me recuerdan. Es más fácil tener relaciones
interpersonales en el Hospital de la Caridad, en general.
El
Hospital de la Caridad también me parece diferente que Wiley en que es más
personal. Aunque no comuniqué con mis compañeros de trabajo mucho en Wiley, las
personas del hospital siempre hablan y hacen cosas juntas. El ambiente del
hospital, en general, me parece muchísimo más relajado. Aunque las personas en
Wiley siempre tienen enfermedades graves, no siempre es el caso en el Hospital
de la Caridad—muchos de los hombres en el Hospital están en estados buenos de
la salud. Entonces, hace sentido que no hay tanto estrés en el Hospital de la
Caridad que en Wiley. Pero también, es más relajado en las normas de la
medicina. Por ejemplo, puedo ponerse inyecciones y pastillas a las pacientes,
algo que nunca podría pasar en Wiley para alguien que no es licenciado en enfermería.
En Wiley, por ejemplo, no puedo ayudar a un paciente a levantarse de la silla
de ruedas, porque hay tanta responsabilidad si la persona se caiga, o algo
similar. Las reglas en Wiley son más estrictas.
Algo
parecido en los dos es el tipo de persona que trabaje en la residencia. Para
trabajar efectivamente y bien en una residencia de mayores, hay que ser muy
paciente y preparado para un desastre de salud. Hay que poder mantenerse
tranquila en una situación de emergencía. En los dos, los trabajadores tienen
una personalidad específica que les permiten a trabajar en eso tipo de trabajo.
¡Espero que yo pueda desarrollar más esas técnicas durante lo demás del
trabajo!
El sitio de Wiley:
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