Ocho meses antes de hoy, estaba hablando con mi profesora de español,
y pidiéndole consejos—no creía que yo estuviera lista para realizar un trabajo
en una ambiente médica en un país nuevo, y en un idioma que ya no fuera natural
ni fácil para mí. Ahora es diciembre, y está agotando mi tiempo en mis prácticas en el
Hospital de la Caridad, en Sevilla. Es la verdad-- ¡que el tiempo vuela! En una
semana, voy a volver a los Estados Unidos, con conocimiento nuevo y una
perspectiva diferente de la medicina, y mí misma.
Mis días en la Caridad consisten en varias cosas. Durante mi
experiencia en el hospital, he conocido y hablado con enfermeros, médicos
generales, especialistas y personas de gestión. He aprendido mucho vocabulario
útil para un trabajo en el campo de medicina. Creo que mi clase del Centro
Norteamericano, “Spanish for the Health Professional,” ha reforzado lo que he
aprendido en el hospital. Tenía la oportunidad de hablar con pacientes y he
desarrollado un conocimiento de cómo presentarme en un lugar profesional y
médico. Mi experiencia en las prácticas me ha enseñado preguntar cuando yo no
entienda, sin temor de hacer errores en hablar español. Es muy importante
hablar y practicar, sin temor de decir algo mal, para mejorar las habilidades
del idioma. La práctica, por supuesto, también me ha ofrecido una oportunidad
de conocer el trabajo más específico que quiero hacer en el futuro, y cómo
funcionan los especialistas juntos para efectivamente curar a un paciente.
He aprendido sobre los sistemas sanitarios de los dos países-- son dos
sistemas que funcionan en maneras distintas. El sistema sanitario de España es
público, y el sistema estadounidense es privado. En España, cualquier persona
puede ir al médico y recibir asistencia médica y recetas, gratis. Y no solo los
españoles, sino cualquier persona quien esté matriculado con el gobierno. Mi profesora
de mi clase en el Centro me ha dicho que muchas personas de otros países de la Unión
Europeo vienen para operarse o recibir tratamientos más graves, porque también se
pueden atender por gratis. Ahora, porque España está en un estado de crisis
económica, según la misma profesora, a veces hay más copagos para medicamentos,
pero todavía, es muchísima más barata y accesible la asistencia de España que
la de los Estados Unidos. Al mismo tiempo, hay una rama de medicina privado en
España, para que haya que pagar seguros médicos, pero que es más rápido. En los
Estados Unidos, nunca he oído del sistema público ni sé si existe—casi todo es privado
en los EEUU. Los seguros médicos son caros y muy difíciles para obtener si se
tenga una enfermedad grave o preexistente. El presidente Obama intenta plantear
cambios al sistema, para hacer que la asistencia médica sea más accesible para
los pobres. Sin embargo, es un problema muy complejo ahora en los Estados
Unidos…tan complejo y controvertido que el gobierno estadounidense paró de
trabajar unas semanas, sin resultado definido al problema cuando re-empezaron. Después
de experimentar con los dos, es más fácil ver lo mejor—y también, lo peor—de
ambos sistemas. Ha hecho que yo tenga una perspectiva de medicina más objetivo.
He visto por primera vez que la idea de salud puede variar muchísimos en
culturas diferentes—por ejemplo, la percepción del efecto de fumar en la salud
es extremamente distinta en ambos países. A mí, es muy interesante que yo haya
tenido esta experiencia durante un tiempo en que el sistema sanitario de mi
propio país está cambiando mucho, a un sistema que curiosamente me parece más
como el sistema español.
En serio, no hay nada que cambiaría de la práctica.
Al principio, como ya he dicho en mi blog, no me gustaba que fuera a estar
trabajando con un enfermero en vez de un médico. Ahora, creo que era mucho
mejor—he tenido la oportunidad de conocer a todos los médicos de la Caridad, no
solo un especialista o un médico general, y también aprender sobre las
responsabilidades de los otros trabajadores del campo de medicina, como los
enfermeros. No habría podido aprender tanto trabajando con un médico solo. Es
importante saber no solo sobre su propia rama de medicina, sino también como
funciona en relación a las otras y como hacer que funcionen juntos para ayudar
a sus pacientes en una manera completa. Me gustaba mucho también que mi horario
fuera flexible; si yo quisiera viajar un fin de semana, podía trabajar las
horas perdidas otros días, o trabajar unas horas más los viernes que estaba en
Sevilla. Me gustaba ese hospital en particular porque estaba muy cerca del
Centro Norteamericano. Los trabajadores del hospital me han tratado con mucha
paciencia en explicar y con el idioma, y con un deseo de aprender de mi vida.
Creo que ahora tengo la capacidad de ayudar a pacientes que hablan español en
el futuro y que tengo un entendimiento mejor de comunicación en general.
Además, sé como quiero afectar y cambiar, en las maneras pequeñas y posibles,
el sistema sanitario de los Estados Unidos, para tratar mejor a los pacientes,
y para asegurar que el sistema sea justo para todos. Por todas esas razones, no
se han cumplido mis expectativas con respecto a la práctica, sino se han
superado.
Lo
más importante que he aprendido sobre mí misma al llevar a cabo esta práctica
es tener confianza en mí misma. Tengo la sensación de que si yo pueda hacer eso
que me daba tanto miedo, puedo, con determinación y persistencia, realizar todo
que quiero realizar en mi carrera en el futuro.
No comments:
Post a Comment