8a ENTRADA: ¿Qué estoy aportando a la empresa? ¿Tengo libertad para llevar a cabo ideas innovadoras?

Para mí, ¡es la pregunta más difícil hasta ahora! ¿Qué puedo contribuir al hospital y los trabajadores? ¿Puedo compartir ideas para ayudar a la empresa?

En realidad, creo que lo que afecta más mi repuesta es el tipo de trabajo que incluye un hospital. La medicina es un campo muy definido, en que el cuerpo y su tratamiento, la mayoría, es algo predeterminado. Casi nunca hay una oportunidad para la creatividad; con una enfermedad y esas condiciones, hay que seguir eso tratamiento. Es decir, que no es una empresa de negocios, que está siempre pensando en las maneras más de modas o más innovadoras para conseguir más clientes, o vender más productos. La medicina y el cuerpo humano son particulares y formas de ciencias, y más, algo que todo el mundo necesita igualmente. La salud es algo común a todos nosotros humanos. Aunque siempre hay investigaciones para descubrir procesos más seguras, más fáciles, o menos destructivas al cuerpo, un médico, en general, no hace mucho para innovar o crear. La capacidad de pensar en que hacer durante una emergencia es importante en la medicina, pero la libertad de llevar a cabo ideas innovadoras es más el trabajo de investigadores médicos, de laboratorios y universidades.

Entonces, en mis prácticas, no tengo mucha libertad de ser creativa. Tampoco puedo hacer muchas cosas porque todavía no estoy licenciada en la medicina. No es algo que me molesta, porque es una característica del campo de la medicina. A mí me encanta trabajar en el hospital, pero digo que las prácticas en el hospital me ofrecen más que yo lo ofrezco al hospital. Aprendo mucho de las enfermedades, tratamientos, el ambiente de un hospital, interacciones entre personas médicas, y las diferencias entre los sistemas sanitarias estadounidenses y españoles. Sobre todo, estoy aprendiendo el idioma español.

Al mismo tiempo, no es decir que no aporto nada al hospital, los trabajadores, y los residentes. Cada persona necesita un amigo o compañero, especialmente los mayores, y es un papel que yo realizo a veces en el Hospital de la Caridad. En mi rato libre, hablo con los hombres, juego dominós o cartas, y ayudo con servir la comida o hacer las camas. Los médicos y los residentes me dicen historias de los Estados Unidos, y a los que saben inglés les gusta mucho practicar hablar conmigo.

Entonces, ¿tengo libertad para llevar a cabo ideas innovadoras? En realidad, no mucho, pero no es raro en el campo de medicina. Y ¿qué estoy aportando a la empresa? En mi opinión, soy un recurso personal para el hospital—amigo y compañero.